Mis amigos aún no terminan de creerse dónde estuve trabajando como alumna organizadora la semana pasada. Tuvo lugar en Pamplona el I Curso de Cirugía Dermatológica para Residentes organizado por la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV) y necesitaban a una persona para encargarse del protocolo y la organización ¡y allí que fui!
Fueron tres días de trabajo bastante completitos la verdad, tan pronto nos encargábamos de organizar el check-in como de echar una mano en quirófano. ¡Como lo oís! Toda la mañana del sábado 28 tuve que ponerme sobre mi uniforme una bata, mascarilla, guantes, redecilla y calzas para los pies, y ayudar a los residentes y a los profesores que estaban practicando sutura y todo lo explicado el día anterior durante las ponencias que escucharon en el salón de actos de la Facultad de Ciencias de la Universidad.
Fue increíble y muy enriquecedor, ¡aprendí una barbaridad! Las prácticas consistían en operar sobre cerdos distintos tipos de suturas dependiendo de diferentes variables y luego diseñar sobre cabezas eran maniquíes, don’t worry . Se veía a los residentes disfrutando y esa sensación es muy satisfactoria y, sobre todo, súper contagiosa.